Samuel García busca recuperar gobierno de NL
El aval definitivo está en manos del Congreso estatal, controlado por la oposición, y el acuerdo se antoja aún muy lejano
La batalla no ha terminado. Samuel García ha vuelto a Nuevo León para reclamar su cargo como gobernador. El movimiento ha tenido costes. El PAN y el PRI, mayoritarios en el Congreso local, ya han logrado descabalgar al candidato de Movimiento Ciudadano en la carrera presidencial. Pero aún está por ver cuál será el precio a pagar para que confirmen la renuncia a la licencia que, de momento, mantiene en vilo la silla gubernamental del Estado. El pleno local dará entrada al oficio en el que el emecista ha solicitado retomar las riendas de su gobierno y renunciar a la licencia de seis meses que le otorgaron en octubre pasado. De acuerdo con legisladores locales de la oposición, el proceso se podría alargar hasta dos semanas. Y como ha ocurrido en las últimas horas, todo puede cambiar de repente en la entidad norteña. Las negociaciones se antojan muy duras y los preámbulos han comenzado ya la noche de este sábado. García ha acusado a los dirigentes nacionales del PAN y el PRI de haberle exigido altos mandos en la Administración y hasta la condonación de impuestos en las negociaciones para desbloquear a su sustituto.
La crisis jurídica continúa con dos gobernadores que reclaman el puesto. García, gobernador electo, pero oficialmente con licencia y separado del cargo; y un mandatario sustituto, Luis Enrique Orozco, cuyo nombramiento es respaldado y reconocido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, pero no por el emecista ni por su gabinete, que se han atrincherado en el Palacio de Gobierno. Desde el partido naranja se agarran a que una vez notificada la renuncia a la licencia, como ha hecho este sábado formalmente García, ya queda sellada su vuelta. Pero el embrollo aún no ha terminado.
El presidente del Congreso de Nuevo León, Mauro Guerra, señala que será el pleno legislativo quien defina si se le da urgente resolución a la solicitud del gobernador o se sigue el trámite ordinario, el escenario más probable. “El proceso legislativo incluye una discusión, una votación, después del debido análisis jurídico, creo que eso lo plantearemos una vez que recibamos el documento”, aclara Guerra. En este caso, y al enviarse a comisiones como se tiene previsto, dependerá del tiempo que los legisladores quieran alargarlo.