La Catrina, la burla de Posada a las mujeres adineradas
El estilo burlesco de José Guadalupe Posada, hacia las elites europeas y su vista a la sociedad mexicana del siglo XX, lo inspiró a crear una estampa satírica de “La Catrina”
El ilustrador mexicano, José Guadalupe Posada, es un gran referente contemporáneo para escritores y artistas plásticos, gracias a sus litografías donde escenificaba a la muerte, sus estampas populares y caricaturas sobre temas sociales.
Guadalupe Posada eligió a la caricatura de manera personal y natural, gusto que lo llevó al mundo del periodismo y la prensa gráfica, realizando sus primeras obras en El Jicote.
Sin embargo, su estadía en la Ciudad de México le permitió colaborar con sus grabados para los periódicos como La Patria Ilustrada, Revista de México, El Ahuizote, Nuevo Siglo, Gil Blas, El hijo del Ahuizote, entre otras.
Su estilo burlesco hacia las élites europeas y su vista a la sociedad mexicana del siglo XX, lo inspiró a crear una estampa satírica de ‘La Catrina’, dibujo que se volvió un icono de la cultura mexicana.
LA CATRINA COMO SÍMBOLO DE LA CULTURA MEXICANA
Mundialmente conocida, La Catrina es un símbolo característico de la cultura mexicana, especialmente durante las celebraciones de Día de Muertos. No obstante, lo que hoy conocemos como el elegante esqueleto, tiene sus orígenes como una burla social, así lo señala el Instituto Nacional de las Bellas Artes (INBA).
José Guadalupe Posada, creó en modo de sátira a “La Catrina Garbancera”, nombre original del personaje, para ilustrar la hipocresía de los llamados “garbanceros”, que se trataban de indígenas vendedores de garbanzo que portaban una vestimenta similar a las elites europeas, renegando así de su orígenes y cultura.
El ilustrador, quien expresaba “en los huesos, pero con sombrero francés con sus plumas de avestruz”, retrató de esta manera a su reconocida obra, una calavera que únicamente mostraba un sombrero grande, con holanes, plumas y flores.
Tras la publicación del grabado de Posada, la Catrina se volvió un emblema dentro de la cultura mexicana, y un parte aguas para el pintor Diego Rivera, quien fue el encargado de crear a la catrina como hoy la conocemos, un esqueleto que porta un elegante vestido acorde a la época, sin dejar de lado el característico sombrero.
Rivera retrató en su mural “Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central” a la Catrina tomada del brazo de Posada y agarrando de la mano a un niño, que sería el retrato de Diego Rivera en su infancia, y a la artista Frida Kahlo.
CÓMO SURGE EL ARTE DE REPRESENTAR CALAVERAS EN LAS OBRAS DE ARTE
Durante la Edad Media proliferó la representación de “la danza de la muerte” o “danza macabra”, una representación a los distintos periodos de crisis en Europa como el brote de la epidemia de peste.
La primera obra artística donde se representó fue en el cementerio de los inocentes de París, un mural que adornaba el recinto y posteriormente fue destruida, sin embargo, gracias a la copia que realizó Guy Marchat de estas pinturas es que se conoce el suceso.
Las danzas tienen la intención de plasmar una condición igualitaria entre la humanidad a la hora de enfrentarse a la muerte, además de caracterizarse por la aceptación o negación a la que se enfrentan las personas ante el fin de la vida.
No obstante, en algunas representaciones se puede observar como el clero rechaza a la muerte.
