Ejercicio, alimentación y descanso, previenen enfermedades del riñón
En el marco del “Día Mundial del Riñón” que se conmemora el segundo jueves de marzo, especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Colima recomiendan algunas medidas para mantener la salud renal.
Llevar una dieta equilibrada, rica en frutas y verduras; adoptar la práctica de ejercicio regular por lo menos 30 minutos diarios; realizar una revisión anual del estado de salud general; incrementar el consumo de agua natural; y controlar la diabetes y la hipertensión arterial, además de higiene del sueño mediante descanso nocturno de por lo menos 8 horas.
Es necesario hacer conciencia entre la población, sobre la importancia de mantener la salud renal, y para ello, el IMSS cuenta con modelos preventivos de enfermedades crónicas o detecciones oportunas que el médico familiar implementa en la consulta, y que permiten que el paciente obtenga el tratamiento indicado para la enfermedad renal, en el momento preciso.
Detectarlo de manera oportuna evita que la progresión de la enfermedad lleve al paciente a requerir terapias sustitutivas como diálisis y hemodiálisis, o incluso, trasplante del órgano.
Los riñones son órganos vitales que se encuentran en la región lumbar del cuerpo y que realizan funciones tan importantes como la de filtrar las toxinas de la sangre a través de la orina, producir hormonas y mantener el equilibrio de minerales como el calcio y el fósforo.
Los principales padecimientos del riñón, en la población derechohabiente del IMSS, son los derivados de enfermedades crónicas degenerativas como la diabetes mellitus y la hipertensión arterial, ya que cuando éstas no se controlan, propician la enfermedad renal crónica.
Asimismo, hay otras enfermedades denominadas glomerulopatías, intrínsecas del riñón y que se presentan básicamente en los “picos” de la vida, esto es, en menores o en personas adultas mayores.
La insuficiencia renal crónica, es la pérdida gradual de la función renal, que cuando se encuentra en una etapa avanzada impide que el riñón filtre las toxinas del cuerpo, permitiendo que se concentren niveles peligrosos de líquidos, electrolitos y desechos en el cuerpo.
Cualquier persona es vulnerable a padecer alguna enfermedad renal, sin embargo, el sobrepeso, la obesidad, la hipertensión y la diabetes no controladas aceleran la velocidad de progresión de complicaciones.
Desafortunadamente las afecciones renales se están empezando a presentar en edades más tempranas, en pacientes con factores comunes como el sobrepeso, obesidad e hipertensión.
En ese sentido, el IMSS recomienda, acudir periódicamente a su Unidad de Medicina Familiar (UMF) de manera continua a sus citas de control, y de ser el caso, tener un diagnóstico oportuno.